Malaje es una marca granadina que crea cojines con alma a partir de ropa reciclada, telas vintage heredadas, donadas o adquiridas en ventas especiales o lugares poco convencionales. Telas que de no ser rescatadas pasarían a ser residuos.
Pero, ¿cómo puede un cojín tener alma?
Marta, su creadora, lo hace posible fabricando cojines compuesto de trozos de aquí y de allá que hacen que prácticamente puedan hablar y contar los secretos de las manos por las que pasaron. Un objeto con alma es aquel que arrastra una historia, que «ha vivido» en otros lugares y bajo otras formas. Así, las telas que conforman sus cojines con alma mantienen vivas historias, algunas más comunes, otras más místicas.
Esta manera de crear también contribuye a construir un mundo mejor gracias a la reutilización, reduciendo así la producción de materias primas innecesarias.
La elección de las cosas de las que nos rodeamos habla mucho de nosotros mismos.
Yo elijo poco y bueno, y bueno para mi significa respetuoso, coherente y llenito de alma.
Aquí puedes ver parte del proceso de fabricación, en su pequeño y mágico estudio.






